Nadie puede negar que la secadora es un gran invento que nos salva de muchas. Permite tener la ropa seca en un tiempo récord y en los casos de algunos tejidos como las toallas puede dejar un acabado más suave y esponjoso. A pesar de estas grandes virtudes, también puede constituir un enemigo de las prendas íntimas.
¿Por qué? ¿Cuáles son aquellos artículos que no deberías secar de forma artificial? Te lo contamos en las próximas líneas.
Para empezar, las medias y pantis no pueden meterse en la secadora. Por desgracia, todas sabemos lo fácil que es que se produzcan las temidas carreras. Un simple enganchón con otra prenda (sobre todo con botones y cremalleras) basta para arruinarlas. Pero es que además su material se encoge con el calor, así que terminarán por quedarte más pequeñas de la talla que compraste.
Tampoco deberían meterse jamás los sujetadores. Ni siquiera los que parecen “de batalla”. Aunque son una prenda íntima que usamos a diario, son muy delicados. En especial, cuando se someten al calor y la agitación. Así que es preferible secarlos sobre un tendedero (pero, ¡ojo!) no colgados sino en posición horizontal.
Por último, la tercera categoría es el bañador o traje de baño en cualquiera de sus modalidades. La lycra, un componente básico en su confección, se deforma y rompe cuando se somete a las altas temperaturas de la secadora. Si quieres saber cómo cuidarlos de forma apropiada, lee este artículo de nuestro blog.
Además de estas 3 categorías tan definidas, siempre aconsejamos consultar la etiqueta de otros artículos o la descripción del producto en la tienda online ya que arrojan información sobre lo que es admitido o no por esa prenda.
Y si lo que necesitas es renovar las prendas íntimas que ya están arruinadas, pásate por Talla100, nuestra tienda online de ropa interior preferida.
