Este es el eterno dilema: las chicas con pecho pequeño envidian a las que tienen un escote prominente; mientras que las que están dotadas de un pecho generoso, solo se quejan de este hecho… Y es que cada una de nosotras tenemos nuestros propios gustos y preferencias. Pero además, es evidente que cada morfología tiene sus ventajas y desventajas.
Ventajas de un pecho grande y un pecho pequeño
El pecho grande resulta más sensual y llamativo a la vista, además de quedar muy sexy con las prendas adecuadas. Las curvas de un pecho generoso hacen el cuerpo de la mujer más voluptuoso. Las chicas que tienen más pecho se sienten más seguras de sí mismas porque se sienten más seductoras y les ayuda a que la cintura se vea más estilizada. De hecho, algunas prendas de ropa están pensadas precisamente para los pechos grandes.
Por su parte, el pecho pequeño te hace lucir más joven y puedes olvidarte de la flacidez y de los pechos caídos, tendrás más facilidad de movimientos para hacer deporte o bailar, disfrutarás de una mejor postura porque tu espalda y tu cuello no tendrán que soportar el peso de un pecho grande. Puedes lucir igual de sexy que una mujer con pecho grande: solo tendrás que encontrar el escote que más te favorezca; y además, puedes optar por no llevar sujetador con según que prendas, lo que es muy cómodo.
Desventajas de un pecho grande y un pecho pequeño
El pecho grande tiende a a lucir flácido con el paso del tiempo, puede ocasionar problemas de salud como dolores en la espalda, en el cuello o en la columna. Si eliges mal las prendas con las que te vistes puede que enseñes demasiado y parezcas un poco vulgar. También puede ser doloroso si haces deporte o alguna actividad que los haga moverse demasiado. Además, las mujeres con muchísimo pecho aparentan tener más peso del que realmente tienen.
Las mujeres con el pecho pequeño tienden a sentirse más inseguras y a querer cambiar el tamaño de sus pechos para dejar de sentirse poco atractivas. Esto aumenta cuando alguna prenda requiere de más pecho como ciertos vestidos o tops, por lo que se pueden olvidar de lucir un buen escote. Este hecho se acentúa muchas veces después del embarazo y la lactancia, que el pecho parece «vacíarse» y se ven casi planas.
Sujetadores para todas las mujeres
Como decíamos al principio, casi nadie está contento con lo que tiene. Afortunadamente, en el mercado hay tantos sujetadores que podemos potenciar lo que nos gusta y disimular lo que no nos favorece. Los sujetadores reductores y los push up hacen maravillas. Por eso, lo mejor es aprender a contentarse con nuestra naturaleza y hacer cuanto esté en nuestra mano para vernos más femeninas.